Choque Reforma debería hacer conciencia sobre la inseguridad vial en México.

Seguridad vial, un momento para reflexionar

La tragedia sucedida en avenida Reforma debería de abrir los ojos del real problema de la inseguridad vial en México: 4 muertos x 4,250 = 17,000. Ésta es la cifra trágica anual que debemos combatir.

Por Alfonso Vélez > @avelezig

El desafortunado hecho de tránsito ocurrido en Reforma donde perdieron la vida cuatro jóvenes y conlleva el sufrimiento irreparable de sus familias pone en evidencia el gran problema de la inseguridad vial en nuestro país; cualquier hecho de tránsito incluyendo este, se queda a los ojos de todo mundo en la culpabilidad exclusiva de los ocupantes del vehículo, es decir el conductor y en este caso, por lo que he leído, la culpabilidad hasta de los pasajeros. Sin quitar la responsabilidad al conductor que al manejar en presunto estado de ebriedad a 184km/h en una vía de 50km/h por supuesto es el que ocasiona este incidente, no nos ponemos a revisar el ecosistema completo que existe en nuestro país para que esto siga sucediendo y no sea sólo un caso aislado.

No es un caso aislado

Esto pasa todos los días en nuestro país, pero no todos son en Reforma a 184km/h en un BMW serie 7 con un video escalofriante. Además de fijarnos en los casos particulares de este incidente, no volteamos a ver ese ecosistema que permite que 17,000 familias pierdan a un ser querido cada año, que seamos el séptimo país con más muertes por hechos de tránsito, que los incidentes viales sean la primera causa de orfandad y la segunda causa de muertes en jóvenes de 15 a 29 años, y que al país los hechos de tránsito le cuesten 150 mil millones de pesos al año.

En 14 años de lucha para mejorar la seguridad vial, he visto y escuchado muchas cosas, pero ahora se me viene a la mente una de ellas. Un Secretario de Seguridad Pública me comentó, «no nos interesa invertir y hacer proyectos que ataquen la inseguridad vial porque cuando hay un muerto en la calle por esta causa todos culpan al conductor, no a la autoridad; en cambio, cuando hay un muerto por un asalto ahí sí todos se nos van encima, por eso la seguridad vial no es una prioridad»… ya se imaginarán mi cara de asombro y frustración, pero ahora con el caso del BMW en Reforma solo reafirma lo que el funcionario me comentó.

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Lo que se debe hacer

Por lo anterior, debemos enfocarnos en resolver los grandes problemas que son el fondo y no la superficie de la inseguridad vial.

1.- Actualizar el REPUVE (Registro Nacional de Vehículos). Es increíble que a la fecha no exista un registro nacional de vehículos confiable, actualizado y con todos los campos que se necesitan, por tanto entidades municipales dependen del «humor» o color partidista para poder tener acceso a consultar del padrón estatal para poder realizar infracciones, y esto mismo ocasiona que tanto estados como municipios se vean imposibilitados de multar a vehículos con placas de otros estados cuando así se requiere.

2.- Estandarizar procesos. A causa de lo arriba mencionado, miles de conductores prefieren matricular y dar de alta sus vehículos a través de gestores en estados vecinos con todo conocimiento de la autoridad, y que solapa esta acción. Ya también alguna vez me lo comentó un funcionario de un estado vecino «no, no, aquí no queremos controlar las faltas al reglamento, pero te agradecemos que debido a que tu proyecto se puso en marcha en el estado vecino muchos ciudadanos se vinieron a emplacar aquí y tuvimos un gran ingreso extraordinario».

3.- Crear una base nacional de licencias. Lo ideal sería que este documento fuera un documento federal con trámite a través de los Estados, esto simplificaría el registro nacional de conductores (licencias) y, además, homologaría el proceso para obtenerlas debido a que en algunos estados prácticamente el requisito es cubrir su costo de $700 pesos para obtenerla. Esto tal vez suene complicado, pero empecemos por una base nacional proporcionada por todos los estados

4.- Aplicar exámenes. Ligado al punto anterior, una homologación de los exámenes teóricos y prácticos acompañados de cursos de primeros auxilios es absolutamente necesaria para mejorar la seguridad vial en nuestro país. Esto siembra la posibilidad de contar con «licencia por puntos» que castiga a los reincidentes, cosa imposible en este momento.

5.- Homologar a nivel nacional de los reglamentos de tránsito y el monto de las sanciones. Debe haber al menos unos 150 entre estatales y municipales, en algunos ni siquiera se contempla la sanción el uso de distractores al conducir o hay sanciones por cruzar el semáforo en rojo equivalentes a $150 pesos con descuento de 50%, la mayoría de las grandes urbes en México están conurbadas, por tanto no existe una división entre municipios y cada uno tiene su propio reglamento, lo que puede ser una multa en uno, en otro no es contemplada, y las sanciones pueden variar del cielo a la tierra.

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6.- Crear una base nacional de infractores. Se necesita tener un registro de infractores y reincidentes a nivel nacional, de esta forma en complemento con la base de datos nacional de licencias se podría llegar a restringir la renovación de la misma o retirarla parcial o totalmente; incluso compañías de seguros podrían especificar sus tarifas de acuerdo a esta base de datos.

7.- Repensar y rediseñar nuestras ciudades. Para el 2050 el 70% de la población vivirá en las grandes urbes, es por esto que nos vemos obligados pensar y planear de otra manera las metrópolis. No hay espacio suficiente para mover a 1.4 personas por vehículo, necesitamos que la inversión en transporte público motorizado y no motorizado sea una prioridad para que este sea seguro, eficiente y limpio.

8.- Pensar en el urbanismo táctico para el rediseño de las vialidades enfocado en proteger a los usuarios más vulnerables, según la jerarquía de la pirámide de la movilidad. Este tiene que ser obligatorio para todos los niveles de gobierno, el diseño de calles completas, intersecciones con pasos seguros, zonas 30, ciclovías a nivel de calle a extrema derecha, vías preparadas para personas con discapacidad motriz y débiles visuales, todo esto viene en el Manual de calles que se está elaborando a nivel nacional donde su objetivo debe ser elevarlo a Norma Mexicana.

9.- Diseñar más espacios caminables, más ciclovías y la implementación de sistemas de bici pública. Esto no sólo permite pacificar el tráfico, sino también

incrementar la seguridad, es imperativo que todo gobierno tenga en una política pública de movilidad donde se incluyan estas acciones.

10.- Instalar Centros de Control de Movilidad con plataformas de SmartMobility. En las grandes urbes del país sean estados o municipios se deben instalar Centros de Control de Movilidad con plataformas de SmartMobility donde se pueda monitorear las ciudades en tiempo real respecto a flujos, contaminación e infraestructura urbana, con sistemas de análisis y planeación, así como simulación; por ejemplo la implementación del modelo matemático Space Syntax para realizar análisis de las vialidades donde, por su diseño y construcción, podemos determinar su peligrosidad para atropellamientos y, por tanto, implementar acciones como rediseño y control con base científica.

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11.- Fomentar la seguridad vial, y en especial prevenir la conducción cuando se ha ingerido alcohol. Una muy buena amiga quien cuenta con una fundación para fomentar la seguridad vial, y en especial prevenir la conducción cuando se han ingerido bebida embriagantes, me comentó que la tolerancia para la ingesta de alcohol debería ser “CERO” ya que cuando se permite un rango, cualquiera que este fuere, en realidad no queda claro para nadie cuánto es ese rango, además cada persona reacciona diferente a la cantidad y tipo de alcohol que consume, por tanto, en muchos casos termina manejando “el que menos tomó” esperando que pase el control en caso de operativo, por tanto a nadie le queda claro cuánto puede tomar. Es más simple decir si tomas NO puedes manejar, punto.

12.- Exigir más controles de seguridad. En México las exigencias de seguridad hacia los fabricantes de vehículos son mínimas, el claro ejemplo que vivimos es el Tsuru de Nissan que estuvo en venta hasta hace un par de años, y que seguimos viendo miles en las calles por ser el auto preferido de los taxistas. Este automóvil no cumplía con las más mínimas normas de seguridad exigidas en casi cualquier país del mundo, sin embargo aquí se permitía su venta y se sigue permitiendo su circulación. Pero exigencias mínimas como frenos ABS y bolsas de aire frontales deberían estar ya en la NOM Mexicana.

13.- Ser más estrictos en el monitoreo y sanciones en carreteras. Hablando de circulación en autopistas, la falta de monitoreo y sanción por exceso de sobre peso para el transporte mercantil es un peligro latente para todos. La mayoría del transporte de mercancías se realiza por este medio, y cada transporte mercantil con estas características además de dañar la carpeta asfáltica y causar incidentes viales, vuelve más difícil la maniobrabilidad y frenado de las unidades, incrementando así la posibilidad de un accidente de tránsito con consecuencias fatales, como hemos visto en repetidas ocasiones.

14.- Crear una Ley General de Movilidad Segura, Eficiente y Sustentable a nivel Nacional, para poder poner todo esto en marcha.

Si seguimos culpando exclusivamente a los involucrados en los hechos de tránsito, no podremos cambiar los pésimos resultados obtenidos hasta el momento y tragedias como el de Reforma se seguirán presentando todos los días.

One Comment

  1. F. Mariscal

    Excelente propuesta, hay que buscar que se difunda en grande. Yo haré mi esfuerzo para lograrlo!

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