CDMX: A punto del infarto

Quien viaja en la Ciudad no tiene escapatoria: sino sufre el congestionamiento vial, sufre los apretones en el Metro.

Por Andrea Peniche > @aneapt

Transportarse en la ciudad, literalmente, puede resultar doloroso, estresante y hasta peligroso; pese a que la Ciudad de México cuenta con la mejor cobertura de todo el país, la desarticulación que existe entre los diversos medios de transporte y la política de privilegiar el uso del automóvil privado han provocado una movilidad disfuncional.

La más reciente Encuesta del Dolor del Viajero, realizada por el Institute for Business Value, indica que la Ciudad de México, de 20 urbes analizadas en el mundo, es la más dolorosa para movilizarse.

En dicho ranking, en el que la empresa IBM contempla factores como la inversión de tiempo, gasolina y pasajes, además del desgaste emocional que generan los traslados, expone que moverse en la Ciudad de México es más difícil que en Beijing, China; Moscú, Rusia; Sao Paulo, Brasil, o Londres, Inglaterra.

En términos de equidad, abunda la Encuesta Nacional de Movilidad, las personas de bajos ingresos no tienen más remedio que viajar en transporte público, el modo de transporte peor calificado de todos.

Según la percepción de sus usuarios, el transporte público en la capital, como en todo el país, es lento, inseguro, incómodo, tardado, de bajo acceso, caro, se encuentra en mal estado y está sucio.

Por tal motivo, buena parte de los 5.5 millones usuarios de auto en la Ciudad, que representan el 30 por ciento de la población, no es tán dispuestos a usar el transporte público bajo ninguna circunstancia.

También te puede interesar:  En 2017 llega a CDMX el segundo hospital para mascotas

Adicionalmente, y debido a la residencia periférica de los más pobres, cuando no existen rutas que conectan con los destinos deseados, los viajes tienen que ser multimodales, lo que implica viajes más tardados debido a los tiempos de caminata y transbordo entre los diversos sistemas de transporte.

Mejor no salir

Ante las dificultades que implica moverse por la ciudad, según la Encuesta Nacional de Movilidad y Transporte 2015, la gente se moviliza poco, lo que resulta preocupante cuando se compara con otras urbes de Estados Unidos.

En promedio, según el estudio, los mexicanos realizan dos viajes al día: uno de ida, de casa al lugar de destino, y de regreso.

En tanto, en ciudades de Estados Unidos las personas realizan en promedio 3.8 viajes a diario, es decir, casi el doble de trayectos. El tiempo de traslado es un factor clave en la inmovilidad actual. En la Ciudad de México y el Estado de México, de manera conjunta, el promedio es el más alto del país, con 57 minutos.

La encuesta detalla que quienes viajan dentro de su misma localidad o colonia invierten aproximadamente 30 minutos en trasladarse, mientras que aquellos que salen de su colonia pero dentro del mismo municipio o delegación hacen alrededor de 44 minutos. Cuando las personas salen de algún municipio pero aún están dentro del Edomex, subraya el documento, el tiempo de recorrido aumenta, pues en promedio se hacen 73 minutos.

Falta de voluntad política

El problema al que se enfrenta la Ciudad de México en materia de movilidad es complejo, por lo que es necesario atacarlo desde diversos frentes, uno de ellos el presupuestario.

También te puede interesar:  Las altas temperaturas influyen en conducta violenta y aumento en la tasa de suicidios en México

Fernando Páez, Director de Sistemas Integrados de Transporte de CTS EMBARQ México, asegura que en dicho rubro lo que realmente hace falta es decisión política.

“Lo que está faltando es lo que yo llamo no voluntad política porque ya está dada, sino decisión política, y la decisión política se ve reflejada en poner el dinero de inversión pública y privada que se requiere para el cambio.

“Sin dinero no hacemos nada, normalmente los presupuestos son deficientes, hay que atender muchos frentes en la Ciudad: la salud, educación, movilidad, temas sociales, entonces nunca hay presupuesto suficiente. Yo podría pensar que, en el marco de las prioridades que tenga la Ciudad, se haga una distribución distinta del presupuesto, pero esas son decisiones de tipo político”, argumentó.

Del total de personas que se mueven en la Ciudad de México, el 70 por ciento lo hace a través del transporte público, en bicicleta o a pie, es decir, a través de las 12 líneas del Metro, 6 líneas de Metrobús, Servicios de Transporte Eléctrico (una línea de Tren Ligero y 8 líneas de Trolebuses), 94 rutas de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), 20 mil microbuses, 140 mil taxis y 171 estaciones de Ecobici.

Y aunque la mayoría de las personas se trasladan en transporte público, el 73 por ciento del presupuesto destinado para movilidad se invierte en infraestructura para vehículos privados y construcciones de segundos pisos o vialidades, lo que resulta contradictorio.

De acuerdo con Enrique Peñalosa, actual alcalde de Bogotá, Colombia, una ciudad desarrollada no es aquella en la que el pobre anda en auto, sino donde el rico utiliza el transporte público.

También te puede interesar:  Escenarios de Transformación, Arquitectos UNAM (1969-2015)

Por lo tanto, en la Ciudad de México urge integrar todos los medios de transporte: permitiría inhibir el uso del auto y el transporte público se volvería más atractivo al dar cobertura con diferentes modalidades, una misma forma de pago y accesos estratégicos que ofrezcan una mejor calidad.

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*