Por Claudia Ángeles > @adalint13 y Andrea Peniche > @aneapt
La firma mexicana Pascal Arquitectos diseñó una vivienda conocida como La casa Maya, ubicada en el poblado de Carrillo Puerto en Mérida, Yucatán, que cuenta con un diseño bioclimático, es decir, que se adapta a la temperatura del exterior brindado frescura durante el calor y calor en invierno.
¿Cómo es eso posible?
Su construcción fue con materiales naturales de la región como palma en el techo, tabiques de tierra ecoblock, madera para la cubierta y celosías, piedra bola, maderas preciosas como cedro, caoba y otras especies tropicales de explotación comercial; además el diseño promueve el contacto con el exterior y la integración con el entorno.
Según los desarrolladores, se trata de una vivienda mínima rural que rompe con el paradigma y estigma de que la arquitectura social es únicamente para los pobres pues este diseño podría ser usado por clases sociales con mayor poder adquisitivo.
Esta casa es sustentable en casi todas las vertientes (económico ecológico y social) y completamente “off the grid”; además vincula la arquitectura con el cuidado a medio ambiente y las características y necesidades sociales de la región.
El prototipo diseñado se puede colocar en lotes pequeños o en terrenos más grandes y agrupar las viviendas en parcelas con espacios comunes de participación conjunta.
La Casa Maya es un claro ejemplo de un diseño bioclimático eficiente, donde se utilizan elementos naturales y materiales de la región que permiten adaptarse a la temperatura del lugar.
Esta es la primera vez, dentro de los casi ya 40 años de trayectoria, que llevan a cabo un diseño de arquitectura social como parte de la convocatoria del Infonavit para crear el proyecto “Del territorio al habitante”.
