El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) dejó de ser un motor de desarrollo.
por Pablo Hernández Lodigiani >@Pablohelo
En la zona, revela la primer entrega de la consulta ciudadana para discutir el destino de los terrenos de la terminal aérea, el 91 por ciento de sus habitantes viven en condiciones de pobreza.
De las 39 colonias de los alrededores, sólo la Moctezuma, Peñón de los Baños, y la Federal realizan actividades económicas relacionadas a la zona aeronáutica. Las demás tienen una economía similar al resto de la ciudad y no reciben ningún beneficio por su cercanía.
Existe un déficit de hospitales, universidades y el valor del suelo es menor en comparación a otras áreas, por ejemplo, mientras en el sur capitalino hay 24 universidades por cada 100 mil habitantes, en la zona del aeropuerto sólo hay 2.5. Es decir, una diferencia 10 veces menor en la infraestructura educativa de nivel superior.
Además, el aeropuerto está rodeado por las concentraciones más importantes de pobreza urbana: Gustavo A. Madero, Iztacalco, Venustiano Carranza y Netzahualcóyotl. Ahí habitan 1 millón 40 mil 158 personas en condición de pobreza.
“Todas las colonias aledañas al aeropuerto mantienen un valor deprimido de su suelo, por debajo del promedio de la Ciudad: 13 mil 900 pesos por metro cuadrado promedio frente a los 17 mil 800 propios del conjunto de la urbe (por ejemplo, Polanco).
“Del análisis, información y datos más actualizados se desprende pues una conclusión crucial: es posible que en alguna época del siglo pasado, la recepción y la partida de vuelos comerciales y de carga haya sido motor de crecimiento, empleo y dinámica económica en el área donde fue ubicado. No obstante, ahora, la presencia del AICM se ha vuelto un factor de empobrecimiento urbano”, revela.
Al crecer la ciudad sonfuentes de trabajo en Muchos aspectos