El río Moscova se convertirá en un espacio público para impulsar el comercio y aprovechar inmuebles en ruinas.
Por Andrea Peniche > @aneapt
Las autoridades de Moscú quieren renovar los espacios urbanos de su ciudad para incrementar la competitividad, habitabilidad y contrarrestar problemas como la congestión vial que hoy día afecta a sus habitantes.
Las orillas del Río Moscova, en Moscú, Rusia, fueron ocupadas por diversas industrias en el siglo 18 con el objetivo de facilitar la transportación de mercancías, sin embargo, muchas fueron abandonadas con el paso del tiempo y hoy esos inmuebles son sólo ruinas que no han sido aprovechados.
Ante esa situación, y con el fin de impulsar la renovación urbana de la zona, la oficina de arquitectura Proyecto Meganom -bajo la dirección de Yuri Grigoryan- realizó un proyecto urbanístico llamado “Puerto del Futuro” para intervenir 10 mil hectáreas que rodean al río.
Con ello planea aumentar la cantidad de áreas verdes, construir servicios como bares, restaurantes y bancos, colocar mobiliario urbano, edificar torres modernas, crear playas naturales e islas verdes que purifiquen el agua e instalar nodos culturales y educativos a lo largo del río.
Transporte tras la transformación urbana
En cuanto al transporte, prevén desarrollar infraestructura para metro, autobuses, tranvías, vías para peatones y ciclistas, así como infraestructura portuaria que conecte una serie de puertos, en donde se podrán tomar ferries para recorrer el río, haciendo que éste también sea un espacio activo desde su interior.
El lugar ya ha sido anteriormente intervenido por las autoridades pues incorporaron muelle, fuentes, juegos iluminados de agua y un sistema de bicicletas para pasear por el lugar.
Proyecto premiado
El “Puerto del Futuro” fue el ganador de un concurso internacional organizado por el Gobierno de Moscú que pretende rescatar la zona y proporcionar ahí una mayor conectividad y mejorar sus instalaciones.
Aunque aún no hay una fecha establecida para iniciar la construcción del proyecto, se anunció que el plan está en marcha y que es apoyado por el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin.
