La publicidad urbana no sólo ocasiona contaminación visual en ciudades mexicanas sino también aumenta el estrés, irritabilidad y accidentes viales por distracción.
Por Juan Carlos Machorro > @juanmachorro
El 97% de los municipios del país no tienen un adecuado reglamento de publicidad exterior y eso ocasiona un gran problema urbano pues el bombardeo de tantas imágenes publicitarias, aumenta la contaminación visual, el estrés, irritabilidad y accidentes viales por distracción, según el presidente de la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU), Jorge Carlos Negrete Vázquez.
En cuanto al estrés, mencionó que la razón se debe a que el cerebro de los seres humanos tiene una capacidad de retención y asimilación de datos limitada y por eso el bombardeo y saturación de anuncios, así como el hecho de estar expuestos a entornos contaminados visualmente con exceso de estímulos (elementos, colores, figuras, entre otros) pueden perjudicar nuestra mente y provocarnos angustia e irritabilidad.
Estas declaraciones también están sustentadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en su estudio ‘Contaminación Ambiental Visual y Publicidad: Afección en la Salud del Individuo’, el cual asegura que la frustración, desorganización, falta de concentración y estrés son algunos problemas que causa la publicidad. También mencionan que el ambiente urbano se ve distorsionado.
CONTAMINACIÓN VISUAL
La contaminación visual es todo aquello que afecta o perturba la visualización de una determinada zona o rompe la estética del paisaje. El cerebro humano tiene una determinada capacidad de absorción de datos que se ve superada por la enorme cantidad de elementos “no naturales” en el paisaje.
Las causas de este tipo de contaminación son: vallas publicitarias, tráfico aéreo, postes de electricidad con cableados, antenas de televisión, parabólicas, pararrayos, basuras o vertederos, grafitis, edificios deteriorados, redes de distribución eléctrica, exceso de señales de tráfico e incluso molinos eólicos que generan energía limpia pero ensucian en cierta manera el escenario natural, declaró el especialista en análisis de imágenes y visualización de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Jorge Márquez Flores.
En ese sentido, el 72.8% de los mexicanos subrayó que la publicidad les afecta mucho, y 25.2% aseveró que »no es algo que les cause mayores problemas»; por otro lado el 63% de los encuestados señaló que en sus ciudades, barrios o pueblos hay mucha publicidad o propaganda, mientras que 35% afirmó que no sufren esa situación ambiental.
CONTAMINACIÓN ELECTORAL
De acuerdo a datos obtenidos durante la campaña electoral del 2012 a nivel federal, se sabe que se generaron dos mil 500 toneladas de plásticos; de éstos, entre 45 y 50% fueron reciclados y el resto terminó en rellenos sanitarios a cielo abierto o en las calles. Por ello, es que diversas organizaciones civiles fomentan que los candidatos a todo puesto político como los propios partidos políticos se encarguen de levantar toda la propaganda que colocan en las calles, ganen o no la contienda electoral.
