A través de los años, Haití ha batallado con varios retos que amenazan su evolución como capital urbana ¿Será que tiene la fórmula para superarlos?
Por Staff CM > @citymanager_
El 12 de enero de 2010 un sismo golpeó fuertemente al país más pobre de nuestro hemisferio, causando la muerte de 316 mil habitantes y el desplazamiento de más de un millón de haitianos. Esta tragedia demostró que aún había mucho trabajo por hacer en materia de la resiliencia urbana.
A partir de esta fecha, la planificación urbana, el reglamento de construcciones y la recuperación social se han transformado con el fin de aprender a mejorar las técnicas de intervención para rescatar el tejido ciudadano que se corrompe tras un suceso de esta naturaleza.
La recuperación de Haití ha sido completa, se baso en el rescate a infraestructuras gubernamentales y espacios públicos. Partió de un diagnóstico que sirvió para sentar bases y definir herramientas para establecer un plan de desarrollo urbano a largo plazo.
Haití está en la búsqueda de definir sus capacidades administrativas, sus medidas para orientar, direccionar y reconstruir el revestimiento ciudadano.
El trabajo hacia un desarrollo urbano
Stéphanie Balmir Villedrouin, ex ministro de Turismo para Haití nos comparte como su país busco la reestructura cuando buscaba recursos financieros sustanciales que permitan la construcción de centros inclusivos, espacios de formación e infraestructura turística para fortalecer su músculo urbano. Con la finalidad de garantizar mejor seguridad a los habitantes y un país preparado ante cualquier reto humano o de la naturaleza.
La limpieza a las zonas costeras, la capacitación técnica en producción, la organización gubernamental, ciudadana y de datos cartográficos para el monitoreo de condiciones sociales son otras de las posibilidades que han brotado en Haití para trabajar en un desarrollo sustentable.
La Organización de las Naciones Unidad (ONU), ha prestado asistencia al país a través de varios métodos y programas de reestructuración que buscan blindar y proteger a la población haitiana de futuros desastres naturales.
Posibilidad de crecimiento
Las zonas urbanas de Haití se han alimentado con carreteras, espacios sociales y cadenas hoteleras con potencial para basar el crecimiento urbano en el turismo.
“La continuidad es una palabra grave”, continuó Stéphanie Balmir Villedrouin, ex ministro de Turismo para Haití, “es importante mantener el impulso o el riesgo de perder los beneficios para los que se han hecho los esfuerzos y sacrificios (…) se debe comprender la importancia de la industria del turismo y también de cómo se está promocionando.”
El pasado ha sido una forma de aprendizaje para Haití; se está educando a los medios desde el urbanismo, se reconocen las diversas formas de trabajar la tenencia de la tierra y se están evaluando las necesidades de vivienda y la efectividad de los campamentos temporales. Todo esto para mejorar la calidad de vida ciudadana e impulsar las construcciones inclusivas y resilientes en uno de los puertos más bellos del mundo.